Las impresoras 3D abarcan un
conjunto muy amplio de tecnologías empleadas para la fabricación rápida de
prototipos, maquetas de arquitectura y, en general, para la construcción de
cualquier modelo 3D directamente a partir de un archivo CAD.
La tecnología de impresión 3D
surge en 1987 de la mano de la empresa norteamericana 3D Systems,
que pone en marcha el sistema conocido como estereolitografía.
Pocos años después, y dada la
gran funcionalidad de esta tecnología, comienzan a surgir nuevos sistemas de
impresión 3D hasta llegar al momento actual del mercado, en el existen varios
sistemas según las necesidades del usuario.
Las principales tecnologías
existentes actualmente son:
- DSPC (Proyección aglutinante): tecnología de impresión 3D que trabaja mediante la deposición de material en polvo (composite) en capas y su ligazón selectiva con el sistema de impresión de "chorro de tinta" de material aglutinante.
- SLA (Estereolitografía): sistema que
proyecta un láser UV sobre un baño de resina fotosensible líquida para
polimerizarla.
- SGC (Fotopolimerización por luz UV):
tecnología similar a la Estereolitografía. Funciona mediante la
solidificación de un fotopolímero o resina fotosensible con una lámpara de
UV de gran potencia.
- FDM (Deposición de hilo fundido):
tecnología que basa su funcionamiento en un hilo de material a 1ºC
que se mueve en el plano XY horizontal con la ayuda de una boquilla. Este
hilo solidifica inmediatamente sobre la capa anterior.
- SLS (Sinterización Láser Selectiva):
sistema que funciona mediante el calentamiento previo de una cubeta en la
que se deposita posteriormente una capa de polvo. Tras esto, un
láser CO2 sinteriza el polvo en puntos concretos para crear la
pieza.
- LOM (Fabricación por corte y
laminado): sistema de impresión 3D basado en la continua colocación de
hojas de papel encolado sobre una plataforma. Tras ser colocada, se
prensa cada una de ellas con un rodillo caliente que la adhiere a la hoja
anterior.
0 comentarios:
Publicar un comentario